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Proyectos

Proyecto de irrigación en la isla de La Reunión

  • Escudo simple
  • 4.3 m (14.1 ft)
  • Trasvase de agua
  • 8.6 km (5.3 mi), 2.4 km (1.5 mi)
  • Conseil Général de la Réunion
  • SOGEA
  • Isla de La Reunión, Francia

Descripción del proyecto

El proyecto de irrigación de la isla de la Reunión se sitúa en dicho territorio francés en el océano Índico, consistiendo en un conjunto de túneles para el regadío de las plantaciones de caña de azúcar, así como para proporcionar agua a los habitantes de la zona oeste de la isla. Dichos túneles transportan el agua desde tres manantiales situados en la zona este de la isla, rica en este elemento, hasta los mucho más áridos territorios del oeste. Entre las organizaciones que han financiado el proyecto está la Unión Europea, el Gobierno Francés, el Departamento de La Reunión y la autoridad de la región de La Reunión.

La constructora SOGEA adjudicó a Robbins en 1990 el contrato de suministro de tuneladora. Robbins construyó una TBM de escudo simple de 4,3 m de diámetro para la perforación de los túneles I y II. El túnel I tiene como objetivo transportar las aguas provenientes del túnel III, así como el agua fluvial de la Rivière de Galets. Esta agua recorre 8,6 km hasta un embalse al oeste de la isla. El túnel II es una galería de solamente 2,4 km que trasvasa , vía sifón, el agua del túnel I por debajo de la Rivière de Galets.

Geología

La geología de los tres túneles constaba fundamentalmente de basaltos con olivinos. Las fallas que la traza atravesaba habían creado zonas muy fracturadas en bloques en las que se encontraban arcillas y lutitas. En estas zonas se produjeron frecuentes avenidas de agua y otras alteraciones geológicas.

TBM

Robbins diseñó la tuneladora de escudo simple para abordar el desafío especial de perforar roca abrasiva contra avenidas de agua en ambos túneles. La cabeza de corte de la máquina incluía cinco cangilones de recogida de escombro y 29 cortadores de 17” con perfil reducido y desmontables desde el interior de la máquina para mayor seguridad del personal.

La cabeza de corte iba accionada por seis motores de 160 kW cada uno, que proporcionaban un par de más de 1297547 Nm. La cabeza de corte, de dos velocidades de giro y articulada, facilitaba el control de la dirección de perforación así como la estabilidad en terrenos fracturados. Robbins equipó también a la máquina con sistemas de bombeo y sellado de la cabeza de corte y escudo, preparando la máquina para acometer la perforación del basalto en condiciones de ingreso masivo de agua.

El sistema de ventilación de la TBM incluía un ventilador de 900 mm de diámetro, tubería de aire, unidad de aire acondicionado y sistema de acumulador de tubería en “cassette”, todo ello montado en el back-up de la máquina.

Perforación del túnel

La tuneladora se enfrentó a los primeros problemas geológicos al inicio del túnel I. Durante los primeros 500 m se atravesaron zonas de detritus volcánico duro, agua y roca fracturada en bloques. La tuneladora atravesó dos zonas de roca muy mala con entradas de agua al túnel de unos 45 l/s. El personal del contratista y los técnicos de servicio de Robbins idearon varias modificaciones a la máquina para mejorar su rendimiento en estas condiciones, como el desmontaje del cortador prolongable para permitir la instalación de un sexto cangilón de recogida de escombro, lo que en adelante facilitó la limpieza de la cabeza de corte aumentando la eficacia de la perforación.

El basalto con olivino, de carácter blando pero de muy alta abrasividad, causó muchos problemas de desgaste de las carcasas de los cortadores de la máquina. El problema lo resolvió parcialmente el personal de obra endureciendo la superficie de dichas carcasas. En las condiciones más extremas de abrasividad, la vida de los discos de corte se situaba entre las 300 h de los cortadores centrales a las 50 de los cortadores en posición de gálibo.